De su obra «Nacionalisme i Federalisme» (1917) extraemos: «Pero cuando la inmigración es copiosa se produce un fenómeno de gran importancia social y política desde el punto de vista nacional. La nacionalidad es invadida por infiltración, por así decir» […] «…que no se asimilan, no se diluyen, no se disuelven«. «La nacionalidad así invadida por infiltración, ¿qué actitud debe adoptar? ¿Ha de combatir aquella inmigración? ¿Ha de tolerarla?». «Cada escuela oficial en lengua ajena es una fortaleza enemiga en territorio propio». 

Así se expresó Rovira i Virgili en su «Diàleg dels catalans» (1913): «Te diré que aquel que no es catalanista no es plena y verdaderamente catalán».
Antoni Rovira i Virgili, en sus artículos en «La Publicitat» de los años 20 y 30 y en su libro «La nacionalització de Catalunya» (1914), plantea que la relación entre Cataluña y España está marcada por “una irreductible oposición espiritual”, con dos visiones del mundo antagónicas. La inmigración resulta un factor objetivo de “descatalanización” y propone una “decidida política de defensa de la lengua y la asimilación lingüística de los inmigrantes para esquivar este peligro”. 
Rovira i Virgili explicó que el objetivo primordial debía ser la infancia. En el periódico ¡Nosaltres sols! explicó en 1931 la estrategia a seguir con los niños: “La única solución sería la de instruirlos, algo casi imposible si pasan de la treintena: árbol que creció torcido, difícilmente se endereza. Pero si de las generaciones de ahora no podemos esperar gran cosa, ¿cabe pensar lo mismo de las que llegan y las que vienen? Los niños y los jóvenes son dúctiles como la cera, y adoptan la forma que se les quiera dar”.
«La Voluntad de los Pueblos«. Sabadell Federal, 24 de noviembre de 1917: “Historia, raza, lengua y geografía, contribuyen poderosamente, decisivamente muchas veces, a formar la voluntad de un pueblo. Pero si a pesar de dichos elementos, la voluntad se decide en otro sentido, aquellos no pueden ahogarla ni detenerla; es la voluntad de los hombres , y no la naturaleza, la que debe imponerse”.
«El paso de las banderas«. La Humanidad, 7 de octubre de 1936: “Cataluña es mucho más que una multitud de gente y un tendido de tierras. Es un pueblo con personalidad y con conciencia. Lenguaje, historia, geografía y biología han juntado aquí para crear un espíritu colectivo con una voluntad. Y eso es la señal de la nación.”
Antoni Rovira i Virgili publicó en el número 196-197 de la Revista de Cataluña, correspondiente a los meses de marzo-abril de 1947, este artículo: “…Existe la idea corriente que Cataluña es el país más rico de España. La riqueza, relativa pero efectiva, de Cataluña, es una imagen inseparable de la visión que se forman los no catalanes. Y los extranjeros suelen ver la península ibérica como un país en conjunto pobre y atrasado, con algunas excepciones, entre las que se destaca en primer término el de Cataluña con su capital populosa y opulenta.«
«… ¿De dónde viene la riqueza de Cataluña?. … Si Cataluña es rica -relativamente rica- lo debe a sus hijos. Son los catalanes los que han hecho rica Cataluña…Lo han ganado ellos con su voluntad tenaz, voluntad que es una de las más fecundas energías del alma racial…Sólo de una manera ha intervenido la naturaleza en la creación de la riqueza de Cataluña: dando a la psicología catalana algunos elementos que han tenido una influencia estimulante. La tierra amorosa y el hermoso paisaje, la acción de la montaña y del mar, la claridad y la tibieza del ambiente, han contribuido a hacer la raza catalana tal como es y le han inspirado la alegría de vivir…«
«… El catalán, sea patrón u obrero, pone su alma en el trabajo y aspira a hacer sentir su presencia concreta y distinta, a controlarlo, a dominarlo, a mantener su supremacía humana.«
«…Estas orientaciones son alentadoras para Cataluña. Avienen con el carácter catalán y le dan la oportunidad de desplegar sus mejores cualidades en el trabajo noble, que es el trabajo bien hecho y hecho a gusto. Se concibe difícilmente una economía catalana de altura sobre la base de las formas colectivas de aglutinación y absorción. Lo que más le sienta y más le conviene, es una serie de densas constelaciones de empresas especiales que relacionen y coordinen todo el sistema de la producción y de la circulación. La gavilla bien atada es, para el trabajo catalán, un mejor símbolo que el bloque macizo.”